Alfalfa

Alfalfa (Medicago sativa)




Características:



Planta perenne de la familia lamiaceae. Tallos erectos, cubiertos de una vellosidad blanquecina. Hojas compuestas, con folículos dentados en el ápice. Flores de color azul o púrpura, agrupados en racimos.


Componentes:

Ácido ascórbico, ácido cítrico, ácido fumárico, ácido málico, ácido oxálico, ácido succínico; alcaloides (betaína y estaquidrina); vitaminas ( vitamina C, vitamina H, vitamina B, vitamina A, vitamina D y vitamina K); saponinas, taninos, fitosteroles (campesterol y estigmasterol); isoflavonas (genisteína); inositol; aminoácidos (triptófano, arginina y asparagina); mnerales (aluminio, boro, calcio, cromo, cobalto, fósforo, hierro, magnesio, potasio, selenio, silicio, sodio y zinc)
 
 


Uso interno



Por la propiedades antiinflamatorias y diuréticas de esta hierba son utilizadas para el tratamiento de infecciones del aparato urinario como la cistitis, nefritis, piedras en el riñón, prostatitis. Además se emplea en hematomas producidos por la acumulación de sangre como consecuencia de algún golpe o desarreglo corporal.

Preparado:


Se recomienda un jugo fresco de 25 gramos de hojas en una taza de agua, tomar dos veces al día.

Uso externo


Por sus propiedades es utilizada para disminuir la hinchazón y reducir el dolor de picaduras de abejas u otros insectos; y ayuda a reducir la inflamación causada en la artritis o artrosis.

Preparado:


Colocar un cataplasma sobre la inflamación , de moler un puñado de semillas y mezclarlos con agua hasta que adquiera una consistencia pastosa.